Sicilia. Trapani, Erice y Marsala

Concha y Luis en Trapani. Sicilia. 

TRAPANI 

Dejamos Palermo. Cada hora salen autobuses de Palermo a Trapani, en la costa occidental. Cogemos el de las 9h (8,60 €) y en dos horas ya estamos en el puerto, parada final y no lejos de la estación de tren. Dejamos las maletas en la consigna-bar (2 €/ bulto) y ligeros de carga nos vamos al centro de la "Cittá di Trapani".

Trapani. Sicilia. Italia

Por la Via Garibaldi, llena de palacios antiguos, salimos al mar. Volvemos a entrar por las callejuelas intentando encontrar la Iglesia del Purgatorio y cuando la encontramos está cerrada ( de 12 a 16 h) así que buscamos un sitio para comer. Nos decidimos por la “Cantina Siciliana” que alguien nos ha recomendado. Pedimos pulpo, fritos de pescado, pasta con sardinas y la especialidad de Trapani: cuscús de pescado, con un buen vino siciliano. Nos gustan estos sabores nuevos aunque por la tarde la digestión nos recuerda que la comida no ha sido tan ligera como parecía.

Garibaldi y Luis en Trapani. Sicilia. Italia

En la Iglesia del Purgatorio (Las Ánimas Santas del Purgatorio) se pueden ver los 20 pasos que sacan las distintas cofradías durante la Semana Santa, en una procesión que dura 24 horas; herencia de la tradición española que se mantiene desde hace 400 años. Uno de los pasos es la imagen del Cristo de la Cama, parecido a los que se ven en muchas iglesias de Aragón.

Cogemos las maletas y con el autobús 21 (1,4 €) vamos al telecabina que lleva a Erice (9 € i/v). Somos los únicos que subimos. En la ascensión vemos Trapani iluminado con las luces de la noche.

 ERICE

Iglesia Madre. Erice. Sicilia

Erice. Sicilia. Italia

Erice. Sicilia. Italia

Erice nos recibe en penumbra y silencio. Atravesamos la Puerta  de Trapani y ascendemos por la solitaria Via Vittorio Emanuelle, con el suelo empedrado formando dibujos que brillan con la humedad de la noche. Nos alojamos en el Hotel Moderno (130 € dos habitaciones con desayuno), un hotel familiar sencillo y acogedor.
Erice está alto (750 m.) y hace fresco. Huele como mi pueblo en invierno, a humo de leña seca. Paseamos por las calles solitarias, empedradas con diferentes dibujos, calles en cuesta con rincones iluminados en los que aparecen casas de piedra o sencillas iglesias con sencillos pórticos. Nos encontramos con la Iglesia Madre, diferente e impresionante con su pórtico gótico y la torre separada de la iglesia.

Subimos por más calles empedradas y solitarias hasta una iglesia (en Erice hay mas de 60), otra, un palacio, otro... y de repente nos encontramos en un mirador con vistas al valle, a Trapani, gusanos de luz que dibujan calles, plazas, edificios y siluetean la linea del mar. Seguimos subiendo y llegamos al castillo, iluminado con una luz tenue que me resulta atractiva e inquietante a un tiempo.

Quartiere Spagnolo. Erice. Sicilia

Con la luz de un día nublado salimos a ver Erice y disfrutar de la belleza de las piedras en este pueblo que se ha quedado parado en el tiempo. 
Vamos hasta el Quartiere Spagnolo, sobre un acantilado con una hermosa vista de la bahía en forma de concha; subimos de nuevo al castillo pero no tenemos opción de entrar porque está cerrado. No nos importa, disfrutamos igualmente del lugar y de las vistas del mar y las salinas que abundan en estas costas.

Castillo de Erice. Sicilia. Italia.

Castillo de Erice. Sicilia. Italia.

Salinas de Trapani desde Erice.Sicilia

Bajamos hasta la Iglesia Madre (2 €) y me sorprende la decoración de un blanco inmaculado de su interior.
La web de Sicilia explica el origen aragonés de la iglesia: “Chiesa Madre  Santa María della Asunta, del siglo XIV, levantada bajo reinado de Federico de Aragón. Su particular campanario, separado de la iglesia es en realidad una torre de vigilancia aragonesa de 1315. El maravilloso pórtico de la iglesia pese a ser gótico, algo inusual en la barroca Sicilia, data del 1426. Sin embargo el gótico del interior es un “parche” de 1852”.

Iglesia Madre. Erice. Sicilia. Italia

Iglesia Madre. Erice. Sicilia. Italia

Comemos en el restaurante San Rocco cerca de la iglesia de San Carlo. Recomendable. Buenísimos espaguetis con sepia y el rissotto de panceta y calabaza.
Dicen que en Erice hay que probar los dulces de la pastelería María Grammatico. Y cumplimos con la tradición tomando unos "canoli" de crema potente que se coloca en las redondeces a pasos agigantados.

Pastel Canoli de Erice. Sicilia

Volvemos a Trapani con el funicular, de nuevo cogemos el bus 21 hasta la estación del ferrocarril y sacamos el billete para salir a Marsala a las 4 de la tarde, en un viaje que dura apenas media hora.

Funicular de Erice. Sicilia

Hacia Marsala. Sicilia

 MARSALA

Marsala es conocida por sus vinos y por tanto parada obligada para Luis, y porque aquí desembarcó  Garibaldi en Sicilia, hecho que dio inicio a la unificación de Italia.

Marsala.Sicilia

Cuando llegamos Marsala está muy animada, pasamos por la calle principal donde se concentran  los comercios, llegamos hasta la plaza de la Catedral y no lejos de allí, en una tranquila plaza, encontramos el Hotel Carmine, un antiguo convento rehabilitado con muy buen gusto, con salones que invitan a sentarse y un amplio y cuidado jardín, el lugar en el que nos vamos a hospedar en Marsala.

Hotel Carmina. Sicilia

Jardin del hotel Carmine. Sicilia

Marsala es una ciudad que tiene encanto y apetece callejear. Llegamos hasta la Puerta Nueva, la cruzamos buscando el mar, pero la oscuridad nos hace volver, damos con zonas de bares que al ser viernes noche están muy animadas, tomamos unos vinos y unas tapas del lugar, paseamos por calles tranquilas con casas bajas y disfrutamos de la noche.

Puerta Nueva. Marsala. Sicilia

Viajar con transporte público tiene sus inconvenientes; en Sicilia los servicios de autobús se reducen considerablemente los domingos, así que tenemos que coger temprano el único bus que nos lleva a Agrigento. No podemos pasar la mañana en Marsala como era nuestra intención, pero qué se va a hacer... Tal vez en el futuro volvamos... 

Otras entradas de Sicilia:
Dos días en Palermo
Trapani, Erice y Marsala
Agrigento y el Valle de los Templos
Cefalù un pueblo de cine